El Consejo de Seguridad de la Naciones Unidas debatió acerca de las “cuestiones generales relacionadas con las sanciones” en la cual se criticó su uso como herramienta que “castigan a la población civil que nada tiene que ver con la situación que dio lugar en ellas” recalcó una nota de prensa de la ONU.
En esta reunión participaron la Secretaría General Adjunta de Asuntos Políticos y consolidación de la Paz, Rosemary DiCarlo, además del Secretario General adjunto de Asuntos Humanitarios y Coordinador de Socorro de Emergencia, Martin Griffiths, quienes subrayaron la necesidad de que las medidas no restrinjan el disfrute de los derechos económicos, sociales y culturales.
Griffiths detalló que tales medidas pueden retrasar o estancar proyectos humanitarios dirigidos a la población civil y amenazar su bienestar, inidca que “las sanciones están presentes en muchas operaciones de ayuda humanitaria. “Afectan nuestras actividades directas e indirectamente y afectan a los civiles, incluso cuando este efecto no es intencional. Por muy inteligentes o específicas que sean, su cumplimiento es un elemento cotidiano en el trabajo de los organismos humanitarios. Pueden perturbar nuestra logística, nuestras finanzas y nuestra capacidad de entrega”.
El Coordinador de Socorro y Emergencia, explicó, que las sanciones violan los principios humanitarios interfiriendo en las relaciones con personas o entidades sancionadas.
Resaltó que ministerios o departamentos que estén dirigidos por personas incluidas en la lista de sanciones, puede limitar “la prestación de servicios sociales y la estabilidad económica al excluir a los destinatarios de la ayuda humanitaria. Bancos u otros operadores comerciales deniegan servicios humanitarios a clientes para evitar cualquier riesgo de sanción, lo que conllevaría a la escasez y aumento de precios”.
Por su parte, la Secretaría General Adjunta para Asuntos Políticos y Construcción de la Paz, enfatizó las consecuencias no deseadas y adversas que pueden generar las sanciones declaró que “el exceso de cumplimiento de las sanciones es un problema muy importante que puede llevar a imponer condiciones adicionales como la negación a proporcionar bienes y servicios”.
Los embajadores de China y Rusia por su lado, condenaron las sanciones unilaterales a países como Venezuela, Nicaragua, Cuba, Irán entre otros, alegan que estos mecanismos de coacción perjudican los esfuerzos de paz e interfieren con la soberanía de las naciones. El embajador adjunto de Rusia, Dmitry Polyanskiy, afirmó que “solo las sanciones del Consejo de Seguridad son legales”.
El embajador chino ante la ONU, Zhang Jun, expuso que las medidas coercitivas unilaterales son “una gran fuente de preocupación” y exacerban las “posiciones de fuerza”, por lo que deberían ser levantadas de inmediato.
Venezuela denunció, en nombre del Grupo de Amigos en Defensa de la Carta de la #ONU, que la autoridad y poderes del Consejo de Seguridad son usurpados por algunos Estados que consideran las "sanciones" como su instrumento preferido para forzar la voluntad soberana de otro Estado. pic.twitter.com/q8rWwVVYjf
— 🇻🇪Mission of Venezuela to the UN (@ONUVENuevaYork) February 7, 2022
Samuel Moncada, embajador de Venezuela ante la ONU, denunció, en nombre del Grupo de Amigos en Defensa de la Carta de la ONU, que la autoridad y poderes del Consejo de Seguridad son usurpados por algunos Estados que consideran las “sanciones” como su instrumento preferido para forzar la voluntad soberana de otro Estado.