La XIX Comisión Intergubernamental de Alto Nivel (CIAN) Rusia-Venezuela, encabezada por la vicepresidenta ejecutiva de la República, Delcy Rodríguez, se llevó a cabo mediante el formato híbrido (presencial y virtual) y arrojó la adopción del Plan de Trabajo 2030, que incluye de 42 nuevas acciones en las áreas energética, financiera, de salud, ciencia, tecnología, minería, transporte, sector agroalimentario, comercio, entre otras.
El viceprimer ministro de Rusia, Dmitry Chernyshenko, reiteró el respaldo integral de Moscú frente a la amenazas de agresión contra Venezuela.
“En nombre del gobierno de la Federación de Rusia, expresamos nuestro apoyo al Gobierno de Nicolás Maduro y nuestra solidaridad con el hermano pueblo venezolano en la defensa de la soberanía nacional frente a las amenazas externas”, afirmó.
El encuentro se produjo en el marco del Tratado de Asociación Estratégica y Cooperación entre ambas naciones. Venezuela y la Federación de Rusia ratificaron su compromiso con la independencia, la autodeterminación, la soberanía y el derecho internacional, así como en la consolidación de un verdadero multilateralismo a través de mecanismos como el Brics.
Refuerzos en áreas estratégicas
En el sector energético, aseguraron la continuidad de la producción de hidrocarburos, al extender por 15 años la vigencia de las empresas mixtas Petro Perijá y Petro Boquerón, con el objetivo de maximizar la eficiencia operativa.
Asimismo, la compañía rusa Barlova acelera gestiones para impulsar la producción y exportación de gas venezolano. En el ámbito financiero, se trabaja para implementar mecanismos de pagos directos y soberanos, para que las tarjetas de débito y crédito venezolanas puedan utilizarse en Rusia y viceversa, utilizando el sistema Mir. El objetivo es facilitar las transacciones para turismo y negocios.
En las áreas de salud, ciencia y tecnología se firmaron protocolos para la cooperación en la investigación de alto impacto, incluido el desarrollo de vacunas contra el cáncer. Un logro relevante es la transferencia tecnológica que hará la empresa Carofan, para que Venezuela produzca su propia insulina a partir del año 2026.
En el sector de minería, se acordó profundizar la exploración y explotación de minerales estratégicos, lo que abarca la cooperación para la gestión de oro y diamante en territorio venezolano.
La conectividad y el transporte fueron tratados igualmente por la CIAN. Se acordó elevar la frecuencia de vuelos directos entre Rusia y Venezuela, lo que representa un avance crucial para el intercambio turístico y para contrarrestar las presiones de aislamiento aéreo derivadas de las medidas coercitivas unilaterales.
En el ámbito agroalimentario, se firmó un protocolo especial para productos del mar, que se suma a los acuerdos existentes para el cacao y el café. La meta de intercambio comercial se fijó en 400 millones de dólares.
Defensa de la Carta ONU y del multilateralismo
Ambas naciones reiteraron su compromiso en defensa de la Carta de las Naciones Unidas, que establece principios fundamentales como la autodeterminación de los pueblos y la igualdad soberana de los Estados, así como la lucha a favor de la paz, la estabilidad y la cooperación multilateral basada en el derecho internacional.
Se ratificó la coordinación en el marco de la OPEP Plus para defender los precios del petróleo y buscar el equilibrio y la estabilidad del mercado energético global.
Rusia y Venezuela también suscribieron acuerdos en las áreas de deporte, juventud y cultura, con miras a fortalecer el conocimiento mutuo y el intercambio de saberes entre ambos pueblos.
