
El Gobierno de la República Popular de China condenó nuevamente las sanciones y otras medidas de agresión contra la industria petrolera venezolana, tras el anuncio de “aranceles secundarios” de 25 % impuestos por Estados Unidos contra los países que comercialicen hidrocarburos con Venezuela.
Guo Jiakun, portavoz de la Cancillería china, dijo en rueda de prensa que Estados Unidos (EE. UU.) “ha abusado durante mucho tiempo de las sanciones unilaterales ilegales y de una jurisdicción de largo alcance”.
Añadió el funcionario que su país considera tales acciones, además de ilegales, como una jurisdicción extraterritorial, que viola el principio de no intervención consagrado en la Carta de las Naciones Unidas. Pidió a EE.UU. que levante las sanciones impuestas a Venezuela, país que ya contabiliza 1039 medidas coercitivas unilaterales.
“No hay ganadores en las guerras comerciales ni en las guerras arancelarias. La imposición de aranceles solo provocará mayores pérdidas para las empresas y los consumidores estadounidenses… Estados Unidos debe hacer más a favor del desarrollo pacífico y estable de Venezuela”, agregó el vocero.
Alianza solidaria
El ministro del Poder Popular para Relaciones Exteriores, Yván Gil, expresó en nombre del presidente Nicolás Maduro su agradecimiento a la República Popular de China por su firme postura frente a las medidas unilaterales e ilegales dictadas contra Venezuela.
Asimismo, exhortó a Estados Unidos a que cese las agresiones la nación y su economía, así como a poner fin a la guerra de tarifas emprendida por la administración de Trump. Afirmó que tales acciones violan el derecho internacional y generan pérdidas millonarias para ambos países.
La retorcida estrategia de Trump
La medida anunciada forma parte del prolongado intento de asfixia económica imperialista contra Venezuela. Su entrada en vigor está prevista para el próximo 2 de abril.
El mandatario estadounidense, Donald Trump, justificó la acción alegando que Venezuela ha sido “hostil a Estados Unidos y a las libertades que defendemos”. Ratificó este arancel se aplicará a cualquier comercio que realicen con Estados Unidos y aseguró que le será impuesto “a cualquier país que compre petróleo o gas de Venezuela”.
En su arremetida, Trump ha afirmado, sin prueba alguna, que durante años Venezuela envió deliberadamente criminales y miembros de bandas violentas a territorio estadounidense. Estas acusaciones forman parte de una estrategia de abierta hostilidad hacia el Gobierno legítimo que encabeza el presidente Nicolás Maduro.