La presidente de México, Claudia Sheibaum, planteó ante el mandatario electo de los Estados Unidos (EE.UU), Donald Trump, que ponga fin al bloqueo económico contra Cuba y Venezuela, por ser causante del sufrimiento de ambos pueblos y originar la migración forzada de sus ciudadanos.
Durante su habitual conferencia de prensa semanal, la mandataria indicó que sostuvo un diálogo telefónico con Trump, en el que enfatizó que nunca propondrá el cierre de la frontera como una medida ante el fenómeno migratorio.
Ante ello, la mandataria expuso la estrategia que su Gobierno ha implementado para atender el fenómeno migratorio, destacando que ha resultado en una disminución de personas que intentan llegar a la frontera norte, y condenó lo que se ha convertido en una política exterior de EE.UU. contra los países que se oponen a su proyecto de gobierno: la aplicación de medidas coercitivas unilaterales (MCU).
En tal sentido, advirtió que la solución del fenómeno migratorio pasa por una estrategia integral y humanitaria, que incluye, entre otros planteamientos, acabar con las MCU a Cuba y Venezuela, países que comparten una historia de pérdidas de millones de dólares a causa del bloqueo económico y financiero que EE.UU. les impone como parte de una clara acción injerencista, que busca el derrocamiento de los gobiernos de ambos países.
El bloqueo asfixia la economía
La comunicación entre Seinbaum y Trump ocurrió un día después de que la máxima líder de México enviara una carta al mandatario electo de EE.UU. respondiendo a sus amenazas de imponer un arancel del 25 por ciento a las importaciones mexicanas y ejecutar un plan de deportación masiva una vez que asuma el cargo, en enero de 2025.
En la misiva, la jefa de Estado de México sostuvo que “no es con amenazas ni aranceles como se va a atender el fenómeno migratorio ni el consumo de drogas en EE. UU.”. También, aseguró que un alza de impuestos solo afectará la economía de ambos países.
En el caso de Cuba, el bloqueo ha ocasionado que, entre marzo de 2023 y febrero de 2024, sus pérdidas en ingresos asciendan a más de 5 mil millones de dólares. En tanto, Venezuela, país que acumula 969 MCU, registra pérdidas que superan los 800 mil millones de dólares en los 9 años de guerra económica.
Esto ha generado que ambos países afronten en los organismos multilaterales una intensa lucha para que sea levantadas estas medidas que son consideradas ilegales por las Naciones Unidas, que ha emitido resoluciones que condenan los daños devastadores del bloqueo en los distintos sectores sociales de estas naciones.