El viceministro de Políticas Antibloqueo de Venezuela y gerente general del Observatorio Venezolano Antibloqueo, William Castillo, reiteró la ilegalidad de las medidas coercitivas unilaterales impuestas a diversas naciones y su ineficacia, destacando que estas sanciones “son derrotables” y han fracasado en su propósito.
Castillo concedió una entrevista exclusiva al medio ruso Sputnik, en el contexto del Foro Económico Internacional de San Petersburgo, celebrado en esa ciudad de Rusia entre el 18 y 21 de junio pasados.
A juicio de Castillo, la agresión económica contra naciones como Rusia y Venezuela ha constituido un rotundo fracaso . “El tiempo ha demostrado que la agresión económica contra Rusia, contra Venezuela, contra los países que deciden libremente su destino, ha fracasado de forma patética”.
Durante el foro, el debate sobre las sanciones fue uno de los puntos centrales. El viceministro calificó de lúcido el planteamiento del presidente Vladimir Putin, quien demostró cómo Rusia logró transformar y adaptar su economía para contrarrestar los impactos de las sanciones, con lo cual ha frustrado los intentos de hacer colapsar su sistema económico.
Asimismo, destacó que las respuestas de los socios comerciales de Rusia ante la amenaza de sanciones secundarias “fueron muy contundentes”, lo que evidencia el rechazo a estas prácticas de coerción y chantaje internacional.
Luminoso mundo emergente
El viceministro de Políticas Antibloqueo parafraseó metáfora utilizada por el presidente Vladimir Putin, sobre la emergencia de un “nuevo sol” en el panorama global. “El sol aparece, aunque tú no lo quieras, todas las mañanas. Y ese nuevo sol es el mundo pluripolar, el mundo de la igualdad, el mundo del respeto a la soberanía, el mundo de las relaciones de cooperación económica. No un mundo de canibalización, ni de agresión, ni de sanciones”, afirmó.
Castillo formuló un llamado a la unidad de las naciones y al respeto al derecho internacional, como vía para superar las políticas sancionatorias. “Si los países se organizan, si los países acatan el derecho internacional, si tienen socios y aliados comerciales respetuosos de esos derechos, podrá consolidarse ese nuevo mundo pluripolar, un mundo sin sanciones”, concluyó.
