
La vicepresidenta ejecutiva de Venezuela y ministra de Hidrocarburos, Delcy Rodríguez, informó que el Gobierno venezolano “no reconoce el procedimiento judicial de venta forzosa de la empresa Citgo Petroleum Corporation”, ejecutado por las autoridades de Estados Unidos en perjuicio de los intereses de Venezuela.
Rodríguez definió la decisión judicial anunciada este lunes como “un vulgar y bárbaro despojo de un activo venezolano en territorio estadounidense, mediante un procedimiento fraudulento”.
Recordó que Citgo es un valioso activo de Petróleos de Venezuela S.A.
(Pdvsa) “que pretende ser expoliado por el Gobierno de Estados Unidos bajo la instrumentalización de un procedimiento judicial claramente contrario a derecho”.
Afirmó que el Gobierno venezolano y Pdvsa fueron intencional e ilegalmente excluidos del proceso judicial debido “al tráfico de influencias del Gobierno estadounidense sobre los tribunales de ese país”.
Dijo que esto le impidió a la nación ejercer el derecho a la defensa, “bajo la grosera excusa de desconocimiento del legítimo Gobierno venezolano”, como parte de lo que definió como “un plan especialmente diseñado para robarse los activos estratégicos de nuestro país”.
Aseveró que parte del dinero robado a Citgo se usó para financiar las acciones del extremismo y el fascismo, en referencia a sectores de oposición que durante años han intentado derrocar al Gobierno bolivariano mediante la desestabilización y la violencia. “Citgo fue tomada por el extremismo, que se hizo pasar como gobierno de Venezuela desde el año 2019”.
Precisó que ”la empresa genera entre 4.000 y 5.000 millones de dólares al año”, lo que añade una pérdida adicional de ingresos de 24 mil millones de dólares para la nación.
Una nueva agresión contra Venezuela
En un comunicado oficial leído por la vicepresidenta, el Gobierno nacional expresó que “la inminente venta forzosa de Citgo constituye un nuevo episodio de la agresión multiforme que se ejecuta desde Estados Unidos contra Venezuela, en complicidad con María Corina Machado, Edmundo González Urrutia, Juan Guaidó, Julio Borges, Carlos Vecchio, José Ignacio Hernández y el grupo de delincuencia organizada autodenominado Asamblea Nacional de 2015, que ha pretendido usurpar la representación de la República y sus identidades en el extranjero para dejar a Venezuela sin defensa alguna frente al robo descarado”.
Rodríguez reiteró en que Venezuela no reconoce ni reconocerá esa venta forzosa, y seguirá adoptando las medidas necesarias para que los autores de este fraude enfrenten responsabilidades penales, “incluida la responsabilidad internacional de entes extranjeros” que han participado en el proceso para despojar al país de su principal activo en el exterior.
“Este vulgar robo pasará a la historia como evidencia potente y patética de que en Estados Unidos no se respetan ni se garantizan las inversiones extranjeras”, enfatizó Delcy Rodríguez.

