La XXI Cumbre de jefes de Estado y de Gobierno de la Alianza Bolivariana para los Pueblos de Nuestra América-Tratado de Comercio de los Pueblos (ALBA-TCP), celebrada en esta capital, condenó en su declaración final el trato discriminatorio hacia Cuba, Nicaragua y Venezuela, que fueron excluidas de la cita hemisferica .
El texto, titulado “ALBA-TCP repudia las exclusiones y el trato discriminatorio en la denominada Cumbre de las Américas de Los Ángeles”, fue leído por el secretario ejecutivo de la entidad integracionista, Sacha Llorenti.
“Repudiamos la política hostil de Estados Unidos y sus pretensiones de exclusión de la llamada Cumbre, lo que constituye un grave retroceso histórico que ofende a los pueblos Lationamericanos y caribeños”, señala el texto.
“Rechazamos el trato discriminatorio de Estados Unidos como país anfitrión de la denominada Cumbre de las Américas contra numerosos representantes de la genuina sociedad civil del continente”, prosigue la declaración.
Defensa de principios
En los 12 puntos de la declaración, se ratifica el compromiso con el fortalecimiento del ALBA-TCP como instrumento de unión de los pueblos, sustentado en los principios de solidaridad, justicia social, cooperación y complementariedad económica; con la integración liderada por la Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños y la Proclama de América Latina y el Caribe como Zona de Paz.
El bloque de integración respalda los reclamos de los países de Nuestramérica de materializar un cambio en las relaciones hemisféricas, con base en la Carta de las Naciones Unidas y el Derecho Internacional, incluye los principios de igualdad soberana, no injerencia en los asuntos internos ni uso de la fuerza, así como la solución pacífica de controversias y la libre determinación de los pueblos.
La ALBA-TCP reafirma su apoyo al multilateralismo como medio para enfrentar los complejos desafíos globales a través de una acción colectiva. Denuncia, asimismo las pretensiones de dominación imperialista de Estados Unidos sobre los pueblos de América Latina y el Caribe, para mantener dividida a la región en función de sus intereses hegemónicos.
La declaración final ratifica el derecho de todos los países a participar en dicho evento en igualdad de condiciones, y enfatiza que el anfitrión de la reunión de Los Ángeles no tiene derecho a imponer exclusiones o condicionamientos violatorios de su soberanía e independencia.
No a la discriminación
El documento denuncia también el trato discriminatorio de Estados Unidos, contra representantes de la sociedad civil del continente y enfatiza que este tipo de reuniones excluyentes, no contribuyen a la solución de ninguno de los urgentes desafíos de la integración ni las amenazas regionales y globales.
Asimismo, destaca la valiente posición de gobiernos, actores sociales, organizaciones y pueblos que han rechazado de diversas formas, las exclusiones de la reunión de Los Ángeles.
No a las medidas coercitivas unilaterales
La declaración rechaza la imposición de medidas coercitivas unilaterales contra Venezuela y Nicaragua, y el bloqueo económico, comercial y financiero contra Cuba, violatorios de los principios de la Carta de las Naciones Unidas y el Derecho Internacional.
Apoyo al multilateralismo
La declaración destaca que los participantes en la XXI Cumbre del ALBA-TCP reafirman su apoyo al multilateralismo, como principal instrumento para enfrentar los complejos desafíos globales en una acción colectiva.
Reafirma su apoyo al multilateralismo como medio para enfrentar los complejos desafíos globales a través de una acción colectiva, y denuncian las pretensiones de dominación imperialista sobre los pueblos de América Latina y el Caribe, para mantener dividida a la región en función de sus intereses hegemónicos.
Destacó que los Jefes de Estado y de Gobierno, Jefes de Delegación de los países del ALBA-TCP, ratifican su compromiso con el fortalecimiento de la alianza como instrumento de unión de nuestros pueblos.
De igual manera denunciaron las pretención de dominación imperial prevista sobre los pueblos de América Latina y el Caribe para mantener dividida la región.
Finalmente reivindica la dignidad nacional de los pueblos, sustentada en el ideario de los próceres de América Latina y el Caribe y respalda los esfuerzos genuinos por fomentar el diálogo respetuoso y convivencia pacífica entre todos los países de las Américas, sin excepción, para encontrar soluciones a los grandes problemas hemisféricos.
Fuente: Últimas Noticias
