
La vicepresidenta ejecutiva de la República y ministra del Poder Popular para Hidrocarburos, Delcy Rodríguez Gómez, anunció el inicio de negociaciones formales con empresas transnacionales del sector energético para concretar la exportación de la primera molécula de gas venezolano, hito proyectado para el año 2027.
La iniciativa busca consolidar a Venezuela, poseedora de las octavas reservas de gas más grandes del mundo, como un actor clave en el mercado energético global.
El anuncio fue hecho durante la participación de Rodríguez, a través de videoconferencia, en el 14° Foro Internacional del Gas, celebrado recientemente en Moscú. Allí subrayó la visión estratégica de convertir a Venezuela en un actor clave y consolidado en el mercado internacional de este hidrocarburo.
Destacó que el potencial gasífero del país busca ser aprovechado ante la creciente demanda regional. Según proyecciones confiables, la demanda de gas en América Latina y el Caribe crecerá más de 150 % en el próximo decenio.
“El gas será fundamental en la transición hacia modelos energéticos sostenibles”, afirmó Rodríguez, al tiempo que destacó que Venezuela busca atraer inversiones, diversificar su economía y fortalecer su papel internacional en el área energética.
Alianzas estratégicas
Rodríguez también recordó los acuerdos estratégicos en energía que Venezuela mantiene con Rusia. Añadió que estas alianzas fortalecerán la cooperación bilateral y la defensa de los recursos naturales de ambas naciones.
En un análisis sobre la geopolítica energética, la vicepresidenta y ministra de Hidrocarburos indicó que, al sumar las reservas de petróleo y gas de Venezuela y Rusia, ambos países concentran alrededor del 24 % de la energía del planeta. Asimismo, analizó el impacto global de las sanciones a Rusia y dijo que la sustitución del gas ruso por el estadounidense en Europa está provocando un alza en el precio de la energía y un proceso de desindustrialización en el continente, lo que disminuye su competitividad.
La vicepresidenta Rodríguez puntualizó que, con estas negociaciones, Venezuela busca ratificar su compromiso con la seguridad energética regional y global, aprovechando sus vastas reservas de hidrocarburos en el marco de la cooperación internacional.