En los tres primeros meses del año en curso, la producción petrolera venezolana creció 42 % en comparación con igual período de 2021. Datos publicados por la Organización de Países Exportadores de Petróleo (OPEP) certifican que, durante el primer trimestre de este año, el país produjo un promedio de 671 mil barriles diarios más con respecto al primer trimestre del año 2021.
El reporte mensual OPEP del mes de marzo ubica la producción de crudo en 728.000 barriles diarios, una leve caída con respecto al mes de febrero. No obstante, fuentes secundarias indican que la producción venezolana aumentó 8.000 barriles diarios durante el tercer mes de 2022, para ubicarse en 697.000 barriles por jornada. El balance general es que la industria venezolana mantiene el ritmo de recuperación de la producción iniciado en 2021.
Recuperación constante
El repunte de la producción petrolera ha sido continuo en lo que va de año. A pesar del impacto de las medidas coercitivas unilaterales impuestas por Estados Unidos sobre Venezuela, Pdvsa ha recuperado el nivel de actividad y la eficacia en todas sus facetas operacionales. La meta fijada para 2022 es elevar la producción hasta dos millones de barriles diarios.
Este esfuerzo se sostiene también en la recuperación del sector industrial y de servicios asociados a la producción petrolera. La industria nacional provee a la industria de válvulas y otras piezas de repuesto, a las cuales no es posible acceder en el mercado internacional debido a las restricciones impuestas por las sanciones estadounidenses. Este factor apuntala la recuperación de maquinarias requeridas para elevar la producción.
“Estamos listos para ensanchar el horizonte de la industria petrolera. Nos proponemos para este año llevar la producción de Pdvsa a dos millones de barriles por día. Tenemos el plan, los recursos aprobados, la experiencia y la tecnología, que además es soberana”, afirmó recientemente el ministro del Poder Popular de Petróleo, Tareck El Aissami.
Este avance responde a una directriz trazada por el presidente Nicolás Maduro sobre las grandes metas de la economía venezolana para 2022, uno de cuyos puntales es el incremento de la producción petrolera y sus derivados, así como de la industria petroquímica y del gas.
Desde 2017, Pdvsa ha sido blanco de tres órdenes ejecutivas emitidas por Donald Trump, que constituyeron en la práctica un embargo total a la principal industria venezolana, y la más importante fuente generadora de divisas de la nación. En los últimos cinco años, Pdvsa fue despojada de Citgo Petroleum y otros activos en Estados Unidos, se le impidió refinanciar su deuda, comercializar petróleo y derivados, y se le confiscaron varios miles de millones de dólares en la banca internacional.
